Hoy he mirado a la muerte
Hoy he mirado a la muerte a
los ojos, cerrando los míos.
Y esperando me hubiese
llevado, sólo he logrado, que riese conmigo.
Después ha sido ella, la que
su mirada ha apartado,
sosteniendo la sonrisa y mis
brazos caídos.
Con su barbilla altiva.
Y se la ha llevado y me ha
dejado, sólo. Sólo, a su lado, y sólo.
Se me ha muerto la soledad, y
sin querer, me quedé sólo.
Nunca la quise, es verdad,
pero ahora me siento tan sólo...
Pensé acabar mis días en sus
brazos, en su mirada fría,
y ahora no puedo, es imposible.
Se acabó mi sueño, terminó mi
pesadilla.
Y no encuentro acomodo.
Nacidos de la misma cuna, resultando
de un mismo clima,
pensé que mi alma era mía,
pero supe que siempre,
siempre fue suya.
Y ahora sólo, sin alma, sin
soledad, sin vida.
Que nunca tuve la mía.
Que si nunca se marchó de mi
lado, jamás conquisté su vida.
Soledad, la muerte me deja ¡Y
que sólo me deja!
y que pocas mentiras, con
ella se lleva.
Cuantas conmigo quedan.
Hoy he mirado a la muerte, y
no me ha llevado.
Maldita sea mi amor, que odio
más que a mi suerte.
Maldita y cien veces maldita,
sea mi muerte.
Texto: Toño Diez.
Foto: Nicolás Saracchini Fotografias
Que forma de escribir!!
ResponderEliminarGenial Toño... Ya echaba de menos leerte.
Te dejo un fuerte abrazo :)
Gracias, Claudia.
ResponderEliminarUn abrazo siempre. :)